Paró de llover ayer al mediodía, pero el pronóstico vuelve a anunciar lluvias para las próximas horas. Según informó la Cooperativa Agropecuaria General Necochea, desde el miércoles a la noche hasta ayer al mediodía, en
nuestra ciudad llovió 138 milímetros; Energía, 117; Balcarce, 126; La Dulce, 155; Las Toscas, 100; Lobería, 120; Los Pinos, 137; Mechongué; Miramar, 125; Otamendi, 117; Pieres, 100; San Agustín, 125; Santamarina, 150.
Las precipitaciones trajeron graves consecuencias en muchísimas casas, donde ingresó el agua por los techos o directamente por las veredas anegadas. Lo mismo ocurrió en las calles del núcleo urbano por las numerosas bocas de tormenta tapadas y la cantidad de agua registrada en tan poco tiempo.
Ayer en varios establecimientos educativos estatales y privados se suspendieron las clases, mientras que en otros hubo actividad, pero con muy poca cantidad de alumnos, ya que la inasistencia fue muy importante.
De todas maneras, el principal problema sigue siendo la crecida del Río Quequén, que sigue complicando a las familias que viven en el sector de la ribera, muchas de las cuales ya se autoevacuaron y están alojadas en casas de familiares, pero sin descuidar sus pertenencias.
Las precipitaciones trajeron graves consecuencias en muchísimas casas, donde ingresó el agua por los techos o directamente por las veredas anegadas. Lo mismo ocurrió en las calles del núcleo urbano por las numerosas bocas de tormenta tapadas y la cantidad de agua registrada en tan poco tiempo.
Ayer en varios establecimientos educativos estatales y privados se suspendieron las clases, mientras que en otros hubo actividad, pero con muy poca cantidad de alumnos, ya que la inasistencia fue muy importante.
De todas maneras, el principal problema sigue siendo la crecida del Río Quequén, que sigue complicando a las familias que viven en el sector de la ribera, muchas de las cuales ya se autoevacuaron y están alojadas en casas de familiares, pero sin descuidar sus pertenencias.
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