Melisa murió a los 19 años, víctima de una explosión y posterior derrame de fosfuro de aluminio (Photoxin) en un incidente totalmente evitable y cuyas consecuencias no fueron evaluadas apropiadamente por las autoridades municipales, cuyos efectos fueron, además, la intoxicación de más de 20 vecinos.
El primer responsable de este estrago, Fernando Cañada, dueño de Shipinsuarence SA y vinculado al partido FE, gracias al Juez Rúa y la Cámara de Apelaciones, está libre y presuntamente haciendo el mismo trabajo. Tanto Vidal, ex intendente, quien debiera haber presidido Defensa Civil en el momento; Llorens, mintiendo por TV; Retamales ex Medio Ambiente, debidamente advertida del problema de seguridad existente; Bombero de Quequen, que permiten el uso de su material a civiles para esconder evidencia, Policía ecológica que aparece tardíamente, etc. Todos partícipes necesarios de este DELITO DOLOSO que se lleva la vida de una joven y pone en peligro todo un barrio. Y con el hecho consumado, la justicia, que mira con un ojo a quienes beneficia con su burocracia, su lentitud y parcialidad. No hay un solo funcionario imputado.
Con el Protocolo de Seguridad funcionando, ya que la policía se ha presentado a pedir datos de este evento, paradójicamente, los vecinos de todo el distrito siguen sin el mapa del peligro, sin saber donde se encuentran estas empresas peligrosas, a quienes se les han habilitado casa o galpones sin la debida seguridad para manipular venenos. El problema ambiental de conjunto, sigue siendo para el intendente López, la promesa y la foto.
La impunidad se ha instalado en Necochea, por lo que el Partido Obrero, no deja de reclamar: JUICIO Y CASTIGO A TODOS LOS RESPONSABLES DE LA MUERTE DE MELISA NUÑEZ.
PARTIDO OBRERO NECOCHEA
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