La ampliación del parque vial comunal, que se ha convertido en un hecho histórico y trascendente para el municipio de Necochea, y el consecuente aumento de las tareas de reparación en las calles de tierra de cada barrio, han despertado mucha expectativa y felicidad entre los vecinos de Necochea y Quequén que, después de muchos años de desidia por parte del Estado, pueden ver a las máquinas trabajando en la puerta de sus casas.
Desde ayer, las flamantes motoniveladoras y retro palas coordinadas por la Secretaría de Planeamiento, Obras y Servicios Públicos se ocupan del reacondicionamiento de todas las arterias del Barrio Fonavi, lugar en el que además del arreglo de las calzadas se realizó el secado, el cuneteado y la poda de árboles.
Además, en la intersección de la Avenida 98 con la calle 65 bis, una cuadrilla de Obras Sanitarias se dedica a la reparación de una pérdida de agua importante que hacía intransitable ese acceso.
En esa cuadra, Elba Gutiérrez, quien vive en la barriada desde hace mucho tiempo, manifestó su alegría diciendo que “me parece muy bueno que estén las máquinas trabajando en el barrio. Antes, no podíamos ni cruzar la calle pero con estos arreglos que están haciendo va a quedar bárbaro”.
“Estamos re contentas porque vemos que la Municipalidad está haciendo algo bueno”, explicó sobre su satisfacción la vecina.
A su lado, Carlos Alberto Repetto, otro de los habitantes del lugar detalló que “antes estaba todo tapado con agua y la gente no puede andar entre el barro”, por ello, haber encontrado la pérdida y estar trabajando sobre la misma “va a solucionar todo, calculo que ahora va a quedar todo bien”, afirmó.
Asimismo, resaltó que “es beneficioso que trabajen las máquinas y que traten de que quede todo bien para que la gente esté conforme. Yo no hace mucho que estoy en el Barrio, pero sé que estaba todo abandonado y me parece que está muy bien que estén trabajando acá”.
Tampoco Antonia Benítez quiso quedarse sin manifestar su parecer sobre el novedoso paso de las máquinas por sus calles, algo que debería ser habitual y frecuente pero a lo que los vecinos no terminan de acostumbrarse. “Hace 15 años que estoy acá y hace mucho que pedíamos para que las máquinas vengan a arreglar, pero si no era por una cosa era por la otra. Ahora pedimos y vinieron enseguida”, comentó alegre.
“Vimos las máquinas nuevas por las noticias y empezaron enseguida a trabajar”, dijo sorprendida por la rapidez con la que el nuevo parque automotor se puso a disposición de cada reclamo. “Esto es muy beneficioso para todo el barrio y esperemos que queden muy lindos los trabajos. Estamos muy contentos”, afirmó Antonia.
Por su lado, Mabel Gutiérrez subrayó sobre la adquisición de la nueva maquinaria que “me gustó mucho y espero que queden bien las calles, que saquen toda la tierra y no la dejen tirada como pasaba antes. Era imposible andar acá, los coches se rompían, pero gracias a Dios las calles están quedando bastante bien y estoy contenta”. Y agregó: “Nos prometieron que hasta que no terminaran con las calles de todo el barrio no se iban, así que los felicito”.
Finalmente, y también muy satisfecho por la construcción del playón deportivo que se construye en el barrio, que brindará un espacio para que los niños puedan recrearse y compartir lindos momentos, Caleb Montiel explicó que vive en el lugar hace unos seis años y en ese tiempo solo ha visto pasar las máquinas dos o tres veces, “pero nunca habían arreglado todas las calles”. Por esa causa, “ahora va a estar mucho mejor. Están arreglando los caños y eso sí es beneficioso para el barrio”, aseveró el joven.
Este tipo de obras y la alegría de la gente por ver al municipio trabajando en la puerta de sus domicilios es un pilar fundacional de la gestión del intendente Facundo López, quien siempre se encarga de agradecer a los vecinos que siguen confiando y pagando sus tasas, “porque es acá adónde van, estos son los hechos concretos”.
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