La Oficina de Protección Ciudadana informa que se está poniendo en marcha un plan de semaforización, que comenzará con el recambio de luminarias, encontrándose en reparación una unidad móvil para ese sector de señalización con el fin de hacer recorridas para despejar la visión de los mismos.
Paulatinamente se trabajará en el recambio de algunas plaquetas que por su uso permanente deben ser reparadas, para por último hacer los recambios de led.
Cabe señalar que se advierte el daño que desconocidos realizan atacando los mismos con piedras, advirtiéndose el peligro que ello implica ya que al ingresar la piedra al circuito muchas veces el caño de metal queda con corriente lo que podría provocar un accidente, misma situación que viven las cámaras de seguridad que permanentemente son atacadas por el vandalismo urbano.
Por lo tanto se hace un llamado a la población para que cuando se observe que están dañando una cámara, un indicador o un semáforo se llame al 911 para que pueda proceder en consecuencia, advirtiendo al igual que con el resto de las señalizaciones que la destrucción de las mismas está contemplada su sanción en el código Penal Argentino:
El robo y/o destrucción de señales de tránsito se encuadra, según el Código Penal, en la figura de daño agravado.
El artículo 184.5 establece que quienes dañen archivos, registros, bibliotecas, museos, puentes, caminos, paseos u otros bienes de uso público, tendrán una pena que va de los tres meses a los cuatro años de prisión.
Sin embargo, los especialistas en derecho penal aseguran que es más probable que un juez entienda que no corresponde esta figura, porque, en la mayoría de los casos, el autor no actuaría con intención de producir daños sino con la idea de apoderarse de los materiales para venderlos por kilogramo y procurarse un beneficio económico, por lo que entraría en la figura del hurto simple (CP, 162) con una pena que va de un mes a dos años de prisión.
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