EL CLIMA

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1/04/2015

La autonomía de Quequén no solo es una necesidad.


Es, fundamentalmente, un derecho.
El pasado sábado 13 de Diciembre, el Secretario General del Partido Socialista Auténtico a nivel nacional, Mario Mazzitelli, visitó la “Carpa de la Esperanza” en la Ciudad de Quequén.
Estuvo acompañado por el Dr. Eduardo Romanín, precandidato a Gobernador de la provincia de Buenos Aires por el PSA en UNEN, junto con el Prof. Leandro Bonaura y Roberto Glen, precandidatos a diputado provincial e intendente respectivamente. También acompañaron el dirigente de Cantera Popular de Necochea Miguel Ángel Nasso y el miembro de la mesa nacional y provincial del PSA Jorge Muroquio.
Además de un grupo de vecinos y vecinas integrantes del movimiento autonomista de esta localidad, se encontraban el histórico defensor de esta causa, Abel Agesta junto con el dirigente Matías Afife.
En la oportunidad de conversó sobre la trayectoria y las característica de la lucha por la autonomía abarcándose también aspectos vinculados con la realidad y dificultades presentes.
Al respecto, los dirigentes que visitaron la carpa manifestaron su absoluto acompañamiento a la causa autonomista por considerar que “por sobre las especulaciones coyunturales de los gobiernos, está el íntimo derecho de los pueblos a definir su presente y su futuro”. Impedirle a los habitantes de Quequén ser dueños y artífices de su administración es impedirles que puedan proyectar la ciudad que desean y organizarla de acuerdo a sus metas y sueños.
El ex concejal Bonaura recordó que “la Consulta Popular cerró la incógnita sobre la voluntad de los quequenenses. Corresponde ahora a la dirigencia reconocer aquella voluntad y expresarla en la absoluta definición sobre la autonomía de esta localidad.”
Quequén no puede seguir siendo el patio trasero de ninguna ciudad o proyecto político que solo contribuye a seguir retrasando y olvidando. Puerto, medioambiente y autonomía son ejes que no pueden abordarse por separado.
Son muchos los problemas pasados y actuales que padecen los quequenenses y la falta de definición sobre esta cuestión no hace más que retrasar su ordenamiento y su progreso.

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