“Los 80 años nos encuentran trabajando para la comunidad”
Mañana lunes la Unión Vecinal de Fomento de Quequén, una de las entidades señeras de la localidad festejará sus 80 años de vida, que al decir de su actual presidente, Walter Bravo, la encuentran “trabajando para que la comunidad siga creciendo”.
El dirigente afirmó que “tristemente, y sin pecar de soberbios, nuestra entidad se destaca desde hace años más que los gobiernos en cuanto a su injerencia en Quequén, cuando debería ser al contrario…”
Bravo resaltó como motores de este presente a “la capacidad de seguir haciendo las cosas en forma transparente, como nos marcaran nuestros antepasados y en unión. Acá los cargos no cuentan; todos trabajamos de la misma manera”.
La comisión directiva de la Unión Vecinal de Fomento está integrada por varios dirigentes jóvenes. “Lo que aprendimos sobre cómo servir a la comunidad y demás, fue de los directivos de antes y hoy lo seguimos practicando con mucho gusto”, subrayó Bravo.
Sobre las actividades actuales de la entidad, que cuenta con 120 asociados, el presidente comentó que “en nuestra sede funciona la Biblioteca de Quequén; así como también la sala de atención primaria del municipio, al que le cedimos sin cargo nuestras comodidades y una sala de kinesiología privada, que posibilita que mucha gente, en especial los jubilados no tengan que trasladarse a Necochea para ser atendidos”.
La atención de una nutricionista y el dictado de clases de música complementan las actividades, mientras que el salón de fiestas es prestado a entidades o alquilado.
En cuanto al estado del antiguo edificio, el directivo puntualizó que “se mantiene bastante bien. Últimamente pintamos y cambiamos casi 100 metros cuadrados de techo. Para ello usamos dinero proveniente de las cuotas sociales, del alquiler del salón y el que se junta en eventos que organizamos”.
La piedra basal de la sede fue colocada el 1º de abril de 1934, aunque la entidad venía funcionando desde un año antes en el edificio actual del Colegio Nuestra Señora de la Merced.
La entidad nació cuando Quequén estaba bajo jurisdicción de Lobería y según explicó Bravo, “su fundación fue motorizada por vecinos prósperos, con el objetivo de administrar los recursos de Quequén y volcarlos a la obra pública en el lugar, lo que en alguna medida seguimos haciendo”.
Dos celebraciones
Las ocho décadas de la entidad tendrán dos celebraciones. La primera el mismo lunes 11 a las 13, con un acto en la sede de 591 Nº 2267, oportunidad en la que se realizará una reseña histórica y se brindará un reconocimiento a los ex presidentes Avelino García, Víctor D´Anunzio, María Biar de Domenech, Carlos Herrero, Pedro De Ilzarbe y Luis Nicolosi, exponentes de una larga lista de dirigentes que están en vida.
Posteriormente, el sábado 23 del corriente tendrá lugar una cena de camaradería en el salón de fiestas de la institución, a la que asistirán unas 150 personas.
Las tarjetas para la cena tienen un costo de $110 y se hallan a la venta en la sede de la Unión Vecinal y a través de los propios dirigentes.
Gestiones públicas
Uno de los cometidos de la nueva camada de dirigentes de la Unión Vecinal ha sido el de colaborar con la comunidad quequenense. “Priorizamos las necesidades”, aseguró Walter Bravo, para recordar las obras que ha hecho la entidad en los últimos tiempos: construimos un monolito en la avenida 554, frente al CEF Nº 76; colocamos una forestación en el lugar; se forestó un sector de la ribera del Río Quequén; se hizo la vereda del CEF y se pintó el frente Hospital Irurzun, entre otras concreciones”.///
fte ecos diarios
Mañana lunes la Unión Vecinal de Fomento de Quequén, una de las entidades señeras de la localidad festejará sus 80 años de vida, que al decir de su actual presidente, Walter Bravo, la encuentran “trabajando para que la comunidad siga creciendo”.
El dirigente afirmó que “tristemente, y sin pecar de soberbios, nuestra entidad se destaca desde hace años más que los gobiernos en cuanto a su injerencia en Quequén, cuando debería ser al contrario…”
Bravo resaltó como motores de este presente a “la capacidad de seguir haciendo las cosas en forma transparente, como nos marcaran nuestros antepasados y en unión. Acá los cargos no cuentan; todos trabajamos de la misma manera”.
La comisión directiva de la Unión Vecinal de Fomento está integrada por varios dirigentes jóvenes. “Lo que aprendimos sobre cómo servir a la comunidad y demás, fue de los directivos de antes y hoy lo seguimos practicando con mucho gusto”, subrayó Bravo.
Sobre las actividades actuales de la entidad, que cuenta con 120 asociados, el presidente comentó que “en nuestra sede funciona la Biblioteca de Quequén; así como también la sala de atención primaria del municipio, al que le cedimos sin cargo nuestras comodidades y una sala de kinesiología privada, que posibilita que mucha gente, en especial los jubilados no tengan que trasladarse a Necochea para ser atendidos”.
La atención de una nutricionista y el dictado de clases de música complementan las actividades, mientras que el salón de fiestas es prestado a entidades o alquilado.
En cuanto al estado del antiguo edificio, el directivo puntualizó que “se mantiene bastante bien. Últimamente pintamos y cambiamos casi 100 metros cuadrados de techo. Para ello usamos dinero proveniente de las cuotas sociales, del alquiler del salón y el que se junta en eventos que organizamos”.
La piedra basal de la sede fue colocada el 1º de abril de 1934, aunque la entidad venía funcionando desde un año antes en el edificio actual del Colegio Nuestra Señora de la Merced.
La entidad nació cuando Quequén estaba bajo jurisdicción de Lobería y según explicó Bravo, “su fundación fue motorizada por vecinos prósperos, con el objetivo de administrar los recursos de Quequén y volcarlos a la obra pública en el lugar, lo que en alguna medida seguimos haciendo”.
Dos celebraciones
Las ocho décadas de la entidad tendrán dos celebraciones. La primera el mismo lunes 11 a las 13, con un acto en la sede de 591 Nº 2267, oportunidad en la que se realizará una reseña histórica y se brindará un reconocimiento a los ex presidentes Avelino García, Víctor D´Anunzio, María Biar de Domenech, Carlos Herrero, Pedro De Ilzarbe y Luis Nicolosi, exponentes de una larga lista de dirigentes que están en vida.
Posteriormente, el sábado 23 del corriente tendrá lugar una cena de camaradería en el salón de fiestas de la institución, a la que asistirán unas 150 personas.
Las tarjetas para la cena tienen un costo de $110 y se hallan a la venta en la sede de la Unión Vecinal y a través de los propios dirigentes.
Gestiones públicas
Uno de los cometidos de la nueva camada de dirigentes de la Unión Vecinal ha sido el de colaborar con la comunidad quequenense. “Priorizamos las necesidades”, aseguró Walter Bravo, para recordar las obras que ha hecho la entidad en los últimos tiempos: construimos un monolito en la avenida 554, frente al CEF Nº 76; colocamos una forestación en el lugar; se forestó un sector de la ribera del Río Quequén; se hizo la vereda del CEF y se pintó el frente Hospital Irurzun, entre otras concreciones”.///
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