La grave situación política e institucional que hoy atraviesa el distrito de Necochea, fruto de la destitución ya consumada por parte del Honorable Concejo Deliberante del intendente, Profesor Horacio Tellechea, acto este último que será revisado por la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires, no es ajeno al reclamo autonomista de la vecina ciudad de Quequén.
Sumado a este marco se encuentra en marcha el año electoral que ya empezó a correr y tener vida propia, con un panorama oscuro en las urnas para el oficialismo que está enrolado en el Frente para la Victoria (FpV), coalición que se encuentra debilitada a partir de la situación antes narrada. Es la que misma que en la actualidad tiene que producir un cambio de 180 grados para captar el interés y el apoyo del electorado y de esa manera reivindicar el modelo que esboza y ejecuta en el país la presidenta de la Nacion, Cristina Fernández de Kirchner.
De aquí se desprende una lógica lectura: ver a la autonomía de Quequén como un HECHO POLITICO trascendental que fortalezca en la región al golpeado FpV y a su vez traslade las miradas de la comunidad a favor de la nueva creación del Municipio de Quequén por encima de la grave crisis política que padece el distrito, circunstancia que parece tenderá a perdurar en el tiempo y posiblemente agravarse más de darse un resultado adverso en las elecciones legislativas a concretarse en la próxima primera en Necochea.
Remarcando a tales efectos, las mayorías propias parlamentarias que hoy posee el FpV en ambas cámaras de la Legislatura (Senadores y Diputados) se saben que son determinantes a la hora de la aprobación de una ley.
No siendo un dato menor se debe citar la presión social que ha ejercido el movimiento social de los vecinos auto convocados de la Carpa de la Esperanza, que ha realizado en reiteradas ocasiones protestas en la Autovía 2. Ello ha motivado la presentación, por parte del ministro de Seguridad de la Provincia de Bs As, doctor Ricardo Casal, de una acción de amparo tendiente a evitar cualquier tipo de protesta sobre el citado paso que conecta las grandes urbes con nuestra costa atlántica, planteo que ha obtenido la venia por parte de la Justicia Provincial hasta finales de abril de 2013.
Por otro lado se ha roto con aquel viejo mito de que el peronismo ortodoxo no acompañaría la división territorial del distrito de Necochea, motivado netamente por una cuestión electoral con aquel famoso concepto de que QUEQUEN ES PERONISTA O QUEQUEN DEFINE LA ELECCION.
Prueba de ello ha sido y es el voto favorable al reclamo autonomista por parte del secretario general de la Uatre, Gerónimo Venegas, un manifestó opositor del oficialismo nacional, provincial y municipal, quien públicamente y en diferentes reuniones en el seno de la Carpa de la Esperanza se manifestó a favor de la creación del municipio de Quequén, poniendo a disposición los legisladores que adhieren a su proyecto político, además de apoyar la larga lucha que ostenta la ciudad y los ciudadanos de Quequén.
El citado Venegas se halla hoy con concretas posibilidades, en el caso de quedar firme la destitución del actual jefe comunal, Profesor Horacio Tellechea, de que su corriente política local pueda acceder, a través del voto de la gente, a la Intendencia del municipio de Necochea.
En esta coyuntura política los quequenenses más que nunca tenemos que hacer oír nuestros reclamos. Más allá de los intereses en juego hay que mostrar a la región los motivos de la lucha que venimos predicando desde hace numerosos años.
Sea cual fuere el pronunciamiento de la clase política actual, seremos nosotros, el movimiento autonomista, los garantes de que en Quequén se revierta la situación que padecen y sufren miles de quequenenses por no contar con los derechos indispensables que cualquier persona en un Estado de derecho se merece.
Se citan, en calidad de ejemplos, el derecho a la salud, a gozar de un medio ambiente sano, a la igualdad, al bienestar general, a tener un presupuesto equitativo y razonable, y demás derechos que ostenta cualquier habitante de la Provincia de Buenos Aires
La autonomía no es un capricho de algunos pocos. Es una necesidad y un derecho de un pueblo. De un pueblo que desde sus inicios pugno por ser libre.
Por otra parte se encuentra "el misterio autonomista" y la frase de que "la bestia que se devora a sus enemigos". Dice el dicho popular lo siguiente: "Siéntate a esperar y verás pasar el cadáver de tu enemigo", o como señala en la Carpa de la Esperanza "Dios es autonomista".
Según parece y están a la vista, los principales enemigos de la causa hoy han caídos en desgracia.
Iniciando la lista nos encontramos con el intendente de Necochea, profesor Horacio Tellechea quien en algún momento de su campaña electoral de 2011 y a la espera del apoyo del pueblo quequenense pasó personalmente a compartir sus proyectos y planes con los vecinos reunidos en la Carpa de la Esperanza. Y sostuvo por entonces que iba a respetar la voluntad del pueblo.
Los autonomistas entendíamos y entendemos que tal voluntad fue plasmada en el plebiscito no vinculante que se realizó no hace muchos años en la ciudad de Quequén, con un apoyo rotundo a la idea de la autonomía, impulsado y apoyado en ese momento por la gestión radical a la que el citado Tellechea perteneció.
Como todo idilio, la cuestión terminó cuando el actual señor intendente asumió su flamante cargo, y no sólo nos restó cualquier tipo de diálogo y apoyo, sino que con tecnicismos fuera de contexto quiso a través de sus dichos deslegitimar aquella consulta popular. Sólo respetó, según surge a la vista, la voluntad popular de quienes lo votaron para poder llegar a la intendencia de Necochea.
Por otro lado, nos encontramos con el enemigo número dos, el profesor Hugo Rodríguez, quien fue reelecto en 2011 como intendente del distrito de Lobería. Lo recordamos por sus declaraciones sobre Quequén con una famosa frase: "A Quequén ni un centímetro de tierra", un concepto cargado de soberbia, característica de su gestión, como si su envestidura le diera la propiedad absoluta y total de su territorio o la decisión final sobre el tema.
Negando cualquier tipo de acercamiento o diálogo con los autonomistas, cabe aclarar que fue pedida mediante expediente, presentado en la propia Municipalidad de Lobería, una reunión con el citado intendente Hugo Rodríguez, la cual nunca se otorgó.
También caído en desgracia, presionado por los cierres de las fábricas locales y por el costo de los 1020 empleados municipales que tiene que afrontar mensualmente su gestión, el intendente de Lobería está al frente de una comunica en la cual lo único que crece, y con lo que sostiene la problemática social de una ciudad sin puestos de trabajo, es el número de empleados municipales. Se puede afirmar que su futuro político es hoy muy incierto en Lobería.
Lo extraño es que ambos, Tellechea y Rodríguez, han sido dirigentes mimados desde el modelo kirchnerista. Los predican el modelo de nuestra presidente Cristina Fernández de Kirchner, el que no han utilizado a la hora de pensar en Quequén y su futuro. Es un modelo que sólo funciona si no le tocan sus intereses.
Lo cierto es que los citados intendentes han caído en desgracia, no por los ataques de los autonomistas, sino porque sus propias gestiones se los están llevando por delante.
Es realmente misterioso pero en la actualidad el clima político favorece el reclamo de Quequén cuando despunta un año eleccionario como este 2013.
La "bestia autonomista", paciente pero constante, ya ha dejado en el camino dos de los obstáculos.
Matías Afife
Autonomista
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